En el campo del uso indebido de las drogas y la rehabilitación de los toxicómanos, “dependencia” significa que una persona tiene un uso habitual de drogas o alcohol que no puede dejar. Tiene una fuerte necesidad de usar drogas para mantener su estilo de vida o cierto nivel de bienestar. El cuerpo y la mente le envían mensajes para que siga drogándose. Cuando la persona ha caído en un estado de constante uso y con la “necesidad” de continuar, se puede decir que tiene una dependencia. Los siguientes cinco signos le pueden indicar si una persona se ha vuelto dependiente de las drogas.

Signos físicos de la dependencia de las drogas

El principal tipo de dependencia es que la persona tenga una conexión física con drogas o alcohol. Este es el hombre que tiene que tomar una cerveza todas las noches después del trabajo o el estudiante universitario que utiliza el Ritalin (que compró ilegalmente) todas las noches antes de su período de estudio. Ellos sienten fuertemente la orden de sus cuerpos de continuar usándola, y a menudo tienen signos físicos particulares de la droga que consumen. Un ejemplo es el “drogadicto” que tiene que rascarse por una constante picazón que realmente no existe.

Dependencia emocional de las Drogas

Una dependencia emocional de una droga es la sensación de que la persona quiere seguir usándola para mantener la forma en que le hace sentir o pensar. A los consumidores de marihuana, por ejemplo, les gusta cómo se sienten cuando están drogados. Ésta no les crea casi ninguna dependencia física (aunque si lo hace en una pequeña minoría de usuarios.) Por el contrario, la droga crea un estado que el consumidor quiere volver sentir una y otra vez. Debido a este deseo, se puede decir que tiene una dependencia emocional de la droga.

Fácil acceso

No siempre es fácil de ver o sentir lo que le está pasando al adicto. Podría ser que usted no sea capaz de distinguir si una persona tiene una dependencia física o emocional de una droga, así que tiene que observar otros signos más sutiles. Una señal es la accesibilidad que tiene la persona a la droga. Si usted sabe de alguien que siempre tiene un montón de licor en el gabinete o cerveza en el refrigerador, esto podría ser una señal de que tiene una dependencia al alcohol. Asimismo, una persona que constantemente se junta con gente que inhala cocaína podría tener esa dependencia a pesar de sus protestas de que no utiliza drogas.

Tolerancia a las drogas

Otro signo de la dependencia es que la persona se ha vuelto resistente a una droga. Cuando se utiliza una droga durante mucho tiempo, puede que empiece a no tener un gran impacto en uno cuando se consuma. Por ejemplo, si alguien abusa de los analgésicos prescritos, con el tiempo, las píldoras no le producirán el mismo efecto. Tendrá que tomar cantidades cada vez mayores o simplemente los utilizará más a menudo con el fin de llegar a tener el mismo efecto. Si se ha dado cuenta de alguien que estaba desarrollando una mayor tolerancia a los analgésicos o incluso al alcohol por frases tales como “Oh, necesito por lo menos cinco tragos antes de sentir algo”, eso puede indicar que la persona es dependiente de esa droga.

Negación de la adicción

Cuando se dé cuenta de algunos de estos síntomas, podría intentar hablar con la persona sobre su posible adicción a las drogas. Si ha visto indicios de que usa drogas ocasionalmente (pero no está seguro de que tenga una dependencia), una buena señal es ver si la persona es dueña de sus actos. Quien niega usar las drogas o el efecto que tienen sobre sí, puede indicar que tiene una fuerte dependencia.